SUPUESTO HIPOTÉTICO

 SUPUESTO HIPOTÉTICO

El alcoholismo en una enfermedad crónica que provoca distintos tipos de enfermedades principalmente la cirrosis también se caracteriza por el consumo descontrolado de una persona, el cual se cree que es capaz de dejarlo con su fuerza de voluntad, donde dicha persona también piensa que no necesita ayuda de nadie porque dice que es algo pasajero que puede controlarlo porque es fuerte.

El alcoholismo surge ya sea porque se le enseño desde pequeño o se fue adoptando mediante el tiempo ya sea porque los amigos lo inducen, para olvidar sus problemas, por decisión propia o simplemente por diversión.

El principal problema es el abuso descontrolado o desmedido del alcohol es una fuente de graves problemas para los jóvenes. Pues el joven lo consume, como anteriormente se dijo, ya sea por diversión o simplemente para encajar en un grupo social. Normalmente los padres no se dan cuenta de ello pues, o están muy ocupados en sus trabajos o simplemente no les prestan la atención necesaria. A esta edad es más común que se vuelvan alcohólicos, según algunos datos dicen que, en países en desarrollo, que la mayor cantidad de personas que sufren esta enfermedad mayormente son alcohólicos adolescentes.

El alcohol a causado demasiadas muertes en los jóvenes porque al asistir a fiestas o reuniones que se realizan en la escuela y consumir alcohol lo que provoca es que conduzcan en estado de ebriedad y provoque accidentes automovilísticos por lo que es más recomendable estar más al pendiente de ellos para que las familias no sufran este tipo de desgracias.

El consumo frecuente de alcohol lo que puede llegar a provocar, normalmente son pensamientos suicidas, problemas de salud, robos o hasta llegar a formar parte de grupos de maleantes o mafiosas.

En definitiva, desde nuestro punto de vista del desarrollo personal de los jóvenes, teniendo en cuenta la extensión e intensidad del consumo de alcohol, y la gran relación de este con los problemas emocionales, cuando se encuentran problemas de este tipo en la adolescencia, debe considerarse que el alcohol, solo o con otras drogas, está jugando un papel importante, incluso como factor causal primario.

 Para que todo este tipo de problemas disminuya se considera que la prevención del alcoholismo debe iniciarse en la adolescencia o incluso antes. La recomendación es no beber nada de alcohol antes de la edad adulta. Para fomentar la abstención alcohólica es fundamental la actitud de la familia del menor; así, hay padres que no quieren que sus hijos beban, pero consumen bebidas alcohólicas con frecuencia en presencia de sus hijos, o hacen comentarios sobre “cuánto bebían de jóvenes”. Esta conducta pro-alcohol puede hacer que el joven considere que el consumo de alcohol es algo normal y deseable en algunas ocasiones (por ejemplo, cuando se está con amigos).

Para los menores de edad en más recomendables poner normas y límites dan seguridad a vuestros hijos/as. Aunque se rebelen contra ellos, necesitan saber lo que está bien y lo que no lo está. Por otro lado, en el establecimiento de estas normas y límites, es necesario que ambos padres estéis de acuerdo. Sobre todo, en lo que es negociable y lo que no lo es y las consecuencias que vuestros hijos/as tendrán que cumplir en caso de saltarse esas normas y/o límites. Respecto al consumo de alcohol, es importante dejarles claro que no les vais a permitir su consumo en la adolescencia porque supone un grave riesgo para su salud y es vuestra obligación protegerles cuando son menores de edad.